El dolor en el coxis puede ser molesto y dificultar actividades cotidianas como sentarse o estar de pie. Esta afección común afecta al pequeño hueso en la base de la columna vertebral, causando molestias y limitando la movilidad. Existen diversas causas para el dolor en el coxis, desde lesiones hasta afecciones médicas. Exploremos las causas, los síntomas y las posibles complicaciones del dolor en el coxis. También hablaremos sobre las opciones de tratamiento y los métodos para aliviar el dolor y controlar las molestias.
¿Qué es el dolor en el coxis?
El dolor en el coxis, conocido médicamente como coccigodinia, es la molestia o el dolor que se experimenta en esta zona. El coxis es un pequeño hueso triangular situado en la base de la columna vertebral. Desempeña un papel fundamental al soportar el peso del cuerpo al sentarse y sirve de punto de inserción para diversos tendones, ligamentos y músculos.
El dolor en el coxis suele localizarse en la articulación sacrococcígea y a menudo se describe como una sensación de tirón o desgarro. Muchas personas refieren sensibilidad al tacto en la zona.
Causas y factores de riesgo del dolor de coxis
El dolor en el coxis puede tener diversas causas y factores de riesgo. Estos incluyen:
Trauma externo: Suele producirse por una caída hacia atrás. Esto puede ocasionar una contusión, dislocación o fractura del coxis.
Trauma interno: El cóccix es susceptible de sufrir lesiones durante partos complejos o instrumentados.
Lesiones por esfuerzo repetitivo: Actividades como el ciclismo y el remo, que implican inclinarse hacia adelante y hacia atrás, pueden sobrecargar los tejidos alrededor del coxis.
Estar sentado durante mucho tiempo: Las superficies duras o incómodas pueden ejercer una presión excesiva sobre el coxis y causar dolor en el coxis al sentarse.
Género: Las mujeres tienen cinco veces más probabilidades de desarrollar dolor en el coxis que los hombres.
Embarazo y el parto: Los cambios hormonales pueden ablandar la zona entre el coxis y el sacro, lo que a veces puede provocar un estiramiento excesivo de los músculos y ligamentos alrededor del coxis.
Peso: El sobrepeso ejerce presión adicional sobre el coxis, lo que puede provocar que se incline hacia atrás. Por el contrario, el bajo peso puede reducir la amortiguación en los glúteos, causando que el coxis roce con los músculos y ligamentos.
Otros factores: Estos factores pueden incluir mala postura, hipermovilidad articular y enfermedad degenerativa de las articulaciones o los discos.
Síntomas del dolor en el coxis
El dolor en el coxis puede manifestarse de diversas maneras, tales como:
Dolor y ternura: Se experimenta en la base de la columna vertebral, cerca de la parte superior de las nalgas.
Dolor en el coxis al sentarse: Suele empeorar durante periodos prolongados sentado o de pie.
Dolor durante la transición: El dolor puede intensificarse al reclinarse estando sentado o al pasar de la posición sentada a la de pie.
Molestias durante la defecación: Algunas personas lo encuentran particularmente incómodo durante las deposiciones o la actividad sexual.
Se observa una masa perceptible en la región del coxis.
Complicaciones
El dolor en el coxis, aunque suele ser manejable, puede causar problemas de salud si no se trata o si se vuelve crónico. Estos pueden incluir:
Síndrome de dolor crónico: Esta afección puede afectar significativamente la calidad de vida de una persona, repercutiendo en actividades cotidianas como estar de pie o incluso sentarse durante períodos prolongados.
Disfunción del suelo pélvico: El complejo muscular del suelo pélvico, que se inserta alrededor del coxis, puede verse afectado, lo que provoca dolor durante las relaciones sexuales, incontinencia urinaria y molestias durante la defecación.
Diagnóstico
Los pasos son los siguientes:
Historia personal: El médico le preguntará sobre cualquier lesión o traumatismo previo en la zona del coxis (caídas o partos difíciles). También le preguntará sobre la naturaleza y la duración de los síntomas.
Examen físico: Inspeccionan la piel alrededor del coxis en busca de signos de infección, quistes pilonidales o hemorroidesPueden realizar una palpación externa para comprobar si existe sensibilidad localizada en el coxis.
Investigaciones radiológicas:
Las radiografías se utilizan habitualmente para confirmar la presencia de fracturas o luxaciones del coxis.
Las radiografías dinámicas, tomadas tanto en posición sentada como de pie, pueden ser beneficiosas para evaluar la movilidad del córtex e identificar anomalías que podrían pasar desapercibidas en las radiografías estándar.
Tomografía computarizada o resonancia magnética: Estas pruebas pueden revelar fracturas, tumores y otras anomalías estructurales.
Discograma coccígeo: Esta prueba de imagen consiste en inyectar contraste y anestesia local en la región sacrococcígea.
Tratamiento para el dolor de coxis
El enfoque para tratar el dolor de coxis depende de su causa y gravedad.
Remedios caseros: Éstos incluyen:
Tomar medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) para reducir el dolor y la hinchazón
Sentarse sobre una almohada en forma de rosquilla o un cojín de gel en forma de cuña para aliviar la presión sobre el coxis.
Aplique compresas calientes o frías en la zona lumbar durante 20 a 30 minutos varias veces al día.
Tomar baños calientes también puede ayudar a relajar los músculos y aliviar las molestias.
Para quienes experimentan dolor durante la evacuación intestinal, los ablandadores de heces pueden resultar beneficiosos.
Tratamiento no quirúrgico: Estos pueden incluir:
Bloqueos del nervio coccígeo (inyección de medicamentos anestésicos y esteroides) para reducir el dolor y la inflamación.
Terapia de masaje
Terapia física para mejorar la postura y estirar los músculos
Se emplean cuando otros tratamientos han fracasado. Incluyen la coccigectomía parcial o total (extirpación de parte o la totalidad del cóccix).
Cuándo ver a un doctor
Buscar atención médica es crucial en algunos casos, como por ejemplo:
Si el dolor persiste durante más de unas semanas a pesar de haber intentado tratamientos de autocuidado
Si las personas experimentan síntomas adicionales como dolor en otras áreas del cuerpo, como las caderas, la parte baja de la espalda o el abdomen.
Si hay fiebre alta, especialmente si alcanza los 39.4 grados Celsius o más, junto con dolor en el coxis
Prevención
Existen diversas medidas que las personas pueden tomar para reducir su riesgo. Estas incluyen:
Mantén una buena postura, especialmente al estar sentado durante largos periodos de tiempo.
Utilizar un cojín para el coxis diseñado especialmente o sentarse sobre una pelota de ejercicio.
Tómate descansos regulares y evita sentarte en superficies duras.
Usar ropa holgada en la zona de las caderas y la parte baja de la espalda.
Realizar ejercicios del suelo pélvico, especialmente durante el embarazo, para fortalecer los músculos que sostienen el coxis.
Minimizar las posibilidades de caídas accidentales instalando barandillas en las escaleras y asegurando una buena iluminación.
Conclusión
El dolor en el coxis puede afectar significativamente la vida diaria, dificultando actividades tan sencillas como sentarse. Siguiendo los consejos proporcionados, muchas personas pueden encontrar alivio y mejorar su calidad de vida. Recuerde: si el dolor persiste o empeora, consulte a un médico. Con el tratamiento adecuado, la mayoría de los casos de dolor en el coxis se pueden controlar satisfactoriamente, permitiendo que las personas retomen sus actividades cotidianas con mayor comodidad.
Preguntas Frecuentes
1. ¿Qué causa dolor en el coxis sin lesión?
Estar sentado durante largos periodos, sobre todo en superficies duras, ejerce una presión excesiva sobre el coxis, lo que provoca molestias. Una mala postura y el sobrepeso o el bajo peso también pueden contribuir al dolor de coxis. En algunos casos, el embarazo y el parto pueden causar dolor de coxis debido a los cambios hormonales y a la presión adicional en la zona pélvica.
2. ¿Caminar es bueno para el dolor de coxis?
Caminar puede aliviar el dolor de coxis, ya que favorece la circulación sanguínea y ayuda a aliviar la tensión en los músculos que rodean el coxis.
3. ¿Debo preocuparme si me duele el coxis?
En la mayoría de los casos, el dolor de coxis no es motivo de gran preocupación y suele mejorar con remedios caseros y reposo. Sin embargo, si el dolor persiste durante más de unas semanas, se acompaña de síntomas como entumecimiento u hormigueo en las piernas, o interfiere con las actividades diarias, es recomendable consultar con un médico.
4. ¿Qué debo evitar si me duele el coxis?
Para aliviar el dolor de coxis, evite permanecer sentado durante largos periodos, especialmente sobre superficies duras. No use ropa ajustada en la zona lumbar ni en los glúteos. También es recomendable evitar actividades que ejerzan presión directa sobre el coxis, como montar en bicicleta o remar, hasta que el dolor disminuya. Además, procure no dormir boca abajo, ya que esto puede empeorar las molestias.
5. ¿Qué alimentos ayudan a aliviar el dolor de coxis?
Si bien no existe una dieta específica para el dolor de coxis, ciertos alimentos pueden ayudar a reducir la inflamación y promover la salud ósea en general. Productos lácteos, Los ácidos grasos Omega-3Las verduras de hoja verde son buenas para la salud ósea. Además, asegurar una ingesta adecuada de vitaminas B6, B12 y D puede beneficiar la salud ósea y el control del dolor.
6. ¿Cómo debo dormir para aliviar el dolor de coxis?
Para aliviar el dolor de coxis al dormir, intente acostarse de lado con una almohada delgada entre las rodillas para mantener las caderas alineadas. Otra opción es dormir boca arriba con una almohada en forma de cuña debajo de las rodillas, lo que puede ayudar a relajar la zona lumbar y el coxis. Evite dormir boca abajo, ya que esto puede dañar la curvatura natural de la columna y agravar el dolor de coxis. Usar un colchón firme y almohadas que brinden buen soporte puede ayudar a mantener una correcta alineación de la columna durante el sueño.