La hipertensión afecta a millones de personas en todo el mundo. Puede dañar tu corazónLos riñones, el cerebro, los vasos sanguíneos y otras partes del cuerpo pueden dañarse. Si estos órganos sufren daños, puede producirse una enfermedad cardíaca, insuficiencia cardíaca, un infarto, pérdida de la visión, un derrame cerebral, insuficiencia renal y otras complicaciones. Afortunadamente, existen medicamentos que pueden ayudar a controlar la presión arterial alta, y uno de los más recetados es el lisinopril. Siga leyendo para obtener más información.
El lisinopril pertenece a un grupo de medicamentos conocidos como inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA) y se utiliza para tratar hipertensión y la insuficiencia cardíaca. Dilata los vasos sanguíneos para que el corazón pueda bombear la sangre con facilidad. Solo se dispensa con receta médica y está disponible en comprimidos. Sin embargo, quienes no pueden tragar comprimidos pueden obtenerlo en forma líquida.
Ahora, echemos un vistazo a la multitud de usos del lisinopril:
Tome el medicamento a la misma hora todos los días, con o sin alimentos. Si olvida una dosis de lisinopril, tómela en cuanto se acuerde. Si ya casi es hora de la siguiente dosis, omita la dosis olvidada y continúe con su horario habitual. No tome una dosis doble para compensar la dosis olvidada.
Durante el tratamiento con lisinopril, es fundamental realizarse revisiones periódicas con su médico para controlar la presión arterial y la función renal.
El uso de lisinopril, como el de cualquier otro medicamento, puede tener efectos secundarios. Pero no todo el mundo tiene por qué experimentarlos.
Si experimenta algún efecto secundario grave, busque atención médica de inmediato.
Antes de tomar el medicamento lisinopril, es importante que conozca estas precauciones:
El lisinopril es un inhibidor de la ECA, lo que significa que inhibe la enzima convertidora de angiotensina (ECA), responsable de la producción de la angiotensina II, una sustancia que estrecha los vasos sanguíneos. Esto puede provocar un aumento de la presión arterial. Al bloquear la ECA, los vasos sanguíneos se dilatan, lo que mejora el flujo sanguíneo. Además, reduce la carga de trabajo del corazón, lo que beneficia a los pacientes con insuficiencia cardíaca.
Sí, puedes tomar lisinopril con otros medicamentos, pero dependiendo de con qué lo tomes, puede haber un impacto en su eficacia y efectos secundarios.
La dosis de lisinopril que le recete el médico dependerá de la afección que esté tratando:
Si olvida una dosis, tómela en cuanto se acuerde. Sin embargo, si ya casi es hora de la siguiente dosis, omita la dosis olvidada y tome la siguiente. Es importante no duplicar la dosis.
Para controlar la insuficiencia cardíaca, la hipertensión y mejorar la recuperación tras un infarto, pocos medicamentos son tan valiosos como el lisinopril. Esperamos que esta guía le haya ayudado a comprender su funcionamiento, cómo usarlo, sus efectos secundarios y las precauciones necesarias para obtener el máximo beneficio. Asegúrese de seguir las instrucciones de su médico y aprovechar al máximo sus ventajas.
Su médico podría recetarle lisinopril para diversas afecciones, como insuficiencia cardíaca e hipertensión arterial. En algunos casos, se utiliza para mejorar la tasa de supervivencia tras un infarto. Las personas con diabetes también pueden tomar este medicamento para proteger sus riñones.
Sí, lisinopril y amlodipino se pueden tomar juntos. En muchos casos, el médico puede recetarlos ambos, ya que actúan de forma sinérgica para lograr un mejor control de la presión arterial.
Sí, tomar lisinopril no daña el corazón. De hecho, se receta para ayudar a personas con afecciones cardíacas. Es capaz de mejorar el flujo sanguíneo al reducir el esfuerzo que realiza el corazón.
No, el lisinopril se considera seguro para los riñones. De hecho, a muchos pacientes diabéticos se les receta para protegerlos. Sin embargo, en algunas personas, especialmente en aquellas con una afección renal preexistente, podrían presentarse problemas renales. Por eso es importante informar siempre a su médico sobre los medicamentos que toma y cualquier diagnóstico que tenga.
Sí, la dosis habitual de lisinopril es una vez al día. Si desea controlar eficazmente su presión arterial, debe tomarlo de forma constante.
Si toma lisinopril por la noche, su presión arterial se mantendrá controlada mientras duerme, lo que reducirá los picos de presión arterial matutinos. Sin embargo, debe seguir las instrucciones específicas de su médico con respecto al horario de la dosis.