22 de septiembre de 2025
Nueva Delhi: Cuando la mayoría de la gente piensa en la enfermedad renal, se imagina a una persona mayor en diálisis o a alguien que ha vivido con diabetes o hipertensión durante décadas. Pero en los últimos años, los médicos han observado un cambio preocupante: la enfermedad renal crónica (ERC) está apareciendo silenciosamente en personas de 30 años e incluso más jóvenes. Los pacientes deben recordar que los riñones no son solo filtros. Regulan la presión arterial, equilibran los electrolitos, eliminan toxinas e incluso influyen en la salud ósea y cardiovascular. Cuando están sobrecargados, el cuerpo da señales de alerta muy sutiles, y para cuando aparecen los síntomas, el daño puede ser ya significativo. Por eso, la concientización, especialmente entre los adultos jóvenes, es fundamental.
El Dr. Ratan Jha, director clínico y consultor sénior, nefrólogo y especialista en trasplantes de los hospitales CARE en Banjara Hills, Hyderabad, explicó que el riesgo de enfermedades renales ha alcanzado niveles sin precedentes entre los adultos jóvenes. Si bien antes era una preocupación principalmente entre los adultos mayores, ahora también afecta a personas relativamente jóvenes.
Existen algunos factores clave que impulsan este cambio:
Hábitos alimentarios: La dieta urbana moderna se caracteriza por el exceso de alimentos procesados, sal y azúcar. El consumo frecuente de snacks envasados, bebidas energéticas y comida rápida supone una carga constante para los riñones. La retención de sal provoca hipertensión, mientras que el exceso de proteínas o azúcar aumenta el riesgo de daño renal.
Deshidratación: Muchos treintañeros, especialmente profesionales, admiten beber muy poca agua durante el día. Las largas jornadas laborales, el alto consumo de cafeína y el alcohol los fines de semana agravan el problema. La deshidratación crónica concentra la orina, aumentando el riesgo de cálculos renales e infecciones, afecciones que pueden dañar el tejido renal si se repiten.
Diabetes y prediabetes: India se ha convertido en la "capital mundial de la diabetes", y lo alarmante es la edad a la que se presenta. La diabetes tipo 2, antes una enfermedad propia de la mediana edad, ahora se diagnostica en personas de entre 20 y 30 años. El nivel elevado de azúcar en sangre daña los vasos sanguíneos de los riñones, un proceso que a menudo comienza de forma silenciosa años antes del diagnóstico de enfermedad renal crónica (ERC).
Uso excesivo de analgésicos: El uso incontrolado de analgésicos y suplementos puede sobrecargar los riñones. Muchos analgésicos, suplementos deportivos e incluso ciertos productos herbales se eliminan a través de los riñones, y su consumo regular sin supervisión médica puede dañarlos gradualmente.
La naturaleza silenciosa de la enfermedad renal
Uno de los aspectos más difíciles de la ERC es que rara vez se manifiesta en sus primeras etapas. La fatiga, la hinchazón de tobillos o los cambios en la producción de orina suelen aparecer solo después de que el daño sea considerable. Por eso, los controles médicos rutinarios son vitales para las personas en riesgo, incluso si se sienten sanas. Pruebas sencillas como la creatinina sérica, el análisis de orina y la ecografía pueden detectar cambios tempranos. En las personas con diabetes o hipertensión arterial, las pruebas de función renal deben formar parte de los chequeos anuales.
¿Qué puedes hacer para proteger tus riñones?
Mantente hidratado: Como recomendación general, se recomienda beber entre 2 y 2.5 litros de agua al día, ajustando la cantidad según el clima y el nivel de actividad. Los refrescos y las bebidas energéticas no sustituyen al agua.
Cuida tu alimentación: reduce el consumo de alimentos procesados y sal, y come muchas frutas, verduras y cereales integrales con proteínas moderadas para proteger tus riñones.
Controla tu nivel de azúcar en sangre: Mantén el azúcar y la presión arterial bajo control. El control regular, incluso a partir de los 30 años, es fundamental si tienes antecedentes familiares de diabetes o hipertensión. Los cambios en el estilo de vida —ejercicio, manejo del estrés y un peso saludable— son muy importantes.
Tenga cuidado con los medicamentos: No tome analgésicos de venta libre durante períodos prolongados sin supervisión médica. Lo mismo se aplica a los suplementos deportivos o productos herbales. Consulte siempre con su médico sobre los posibles efectos secundarios en los riñones.
Cuándo buscar ayuda médica
La hinchazón de los pies, la orina espumosa, la disminución de la cantidad de orina o la fatiga constante pueden ser señales tempranas de problemas renales y no deben ignorarse. Incluso en ausencia de síntomas, quienes presenten factores de riesgo —como diabetes, hipertensión, obesidad o antecedentes familiares importantes— deben someterse a revisiones periódicas.
La idea de que la enfermedad renal afecta solo a las personas mayores está obsoleta. Hoy en día, los hábitos de vida, el estrés ambiental y la creciente prevalencia de la diabetes están provocando que la enfermedad renal crónica (ERC) afecte a adultos jóvenes. La buena noticia es que la detección temprana y la atención preventiva pueden ralentizar o incluso detener su progresión. Proteger tus riñones a partir de los 30 años es una de las mejores inversiones que puedes hacer por tu salud en las próximas décadas.
Link de referencia
https://www.tv9english.com/lifestyle/explained-how-chronic-kidney-disease-quietly-crossed-the-age-barrier-among-patients-article-10872845.html